TODO SOL AMARGO

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Toda luna es atroz y todo sol amargo:

áspero, el amor me hinchó de calmas ebrias.

¡Que mi quilla reviente! ¡Que me pierda en el mar!

- Arthur RImbaud

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Es a través de la particularidad de los medios, formas y materialidades que un artista puede establecer una sujeción a su imaginario y a su capacidad evocativa. Son ellos quienes construyen objetos, imágenes y desarrollan ensayos efímeros atravesados por la precariedad de un tiempo de decepción, sus elecciones precisas o azarosas captan la manifestación sugestiva de las formas y todas ellas conducen a la pronunciación de algún tipo de furia. 

 

Bajo la apropiación y la cita Alfredo Frías y Evi Tártari trabajan la intervención de un archivo que les pertenece, que es parte del legado que heredan de la historia del arte argentino. En la trasposición de la obra de Pablo Suárez, con la reversión del sentido de "fontaine”, se clausura el uso o contexto esperado de todos los elementos compositivos de la pintura. En Espíritu de Resistencia, los símbolos coloniales tienen una impronta similar; uno se pregunta por la violencia del pasado ancestral argentino y latinoamericano que da origen a la disputa de narrativas del presente, que brega por la pervivencia de las formas del territorio que habitamos. 

 

¿Qué puede considerarse nube?

¿Qué pensamos cuando representamos a un bosque? 

 

Por otro lado, estos son algunos de los interrogantes que Adrián Sosa y Marcos Figueroa se replantean alrededor del sistema en el que estamos insertos. Al generar nubes de tierra, crearlas, impulsarlas, aparecerlas, estas asumen lo efímero de su ser sinónimo para así lograr momentáneamente camuflarlas entre sus pares. Casi como un juego, donde se inventan las instrucciones, se repiten las acciones, se da lugar al turno en cada lanzamiento. Sin embargo, al plantar un bosque de hierro, al armar un campo de espinas oxidadas, se pueden evidenciar otras reglas metodológicas, sistemáticas que se alejan de lo lúdico. 

 

Javier Rodriguez, con un dejo de apatía permite que el marco de cinta roja que había dispuesto en el centro de la imagen se rompa, modificando el sentido de la misma, dejándose llevar por lo que no puede controlar y rindiéndose a las condiciones del espacio. Es la fuerza de una acción liberadora la que puede referenciar la violencia con el fin de expresarse en una belleza tangible tanto en su obra como la de Rocío Rivadeneyra, la camiseta con el escudo del C.A.A.I (Club Atlético de Artistas del Interior) busca evadir taxonomías o etiquetas que simplifiquen una reflexión sobre ser artista del interior, no se amedrenta ante la naturaleza de su identidad preconcebida. 
 

Es esta territorialidad inscrita en las obras presentadas que también contribuye a dotarlas de otra capa de sentido: los seis artistas que forman parte de Todo sol amargo provienen de Tucumán pero sus múltiples trayectorias y experiencias dejan más en evidencia sus operaciones de interpelar a la crueldad que una identificación tácita con su provincia. 

 

Construir metáfora es apropiarse de la dureza del hierro y sus terminaciones punzantes, de la brutalidad del rojo y del fuego en una imagen o de los gestos propios de la rudeza del cuerpo. Son alusiones casi contrarias a la delicadeza de la gasa cristal y el encaje de un textil o al cuidado que requiere el modelado en cerámica. Es el compromiso con la poesía lo que lleva a los artistas a subvertir la violencia o a afirmar la fragilidad como lugar de resistencia.